martes, 1 de diciembre de 2009

Comenzar terapia



"
Sí. No es fácil contar cosas íntimas a alguien desconocido. Porque es difícil no imaginar que ése que nos escucha, aunque sea terapeuta, no nos esté evaluando con mirada de juez (un juez tan riguroso como el que uno mismo lleva adentro). Pero no. Sus ojos, que miran de frente y directo a los ojos de quien le está revelando su mundo interno, parecen limpios. Es una mirada bondadosa, aceptante. ¿Quizás mirando esa mirada uno pueda ir aprendiendo un nuevo modo de mirarse a sí mismo?"


de El Terapeuta que no se escondía