martes, 4 de diciembre de 2012

Autoternura

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No, no se trata de “autoestima”. Necesitamos más que eso: un afecto profundo que nos vincule con quienes somos, tal como el que podemos sentir, justamente, por esos amigos que son más que hermanos. De hecho, en la Psicología del Budismo existe un término para el que Oriente no guarda traducción literal: Maitri. Como no hay una sola palabra para describirlo, necesitamos traducirlo con varias: “amistad incondicional consigo mismo”. Y valga la aclaración de que no se trata sólo de un concepto (como tampoco lo es la amistad cultivada para con otra persona!): se trata de una práctica cotidiana. Un modo de bientratarse, de elegir para sí, de “deselegir” (palabra también necesaria!), de mirar con sana compasión nuestras limitaciones, de amar nuestras características de una manera no-narcisista (tal como amamos la idiosincrasia de aquellas personas investidas por nuestro afecto). Sin juicios feroces; sin críticas despiadadas; sin falta de perdones; sin vanidades que nos distorsionen nuestras reales maravillas. Otra vez: tal como describiríamos a un amigo muy querido, a un compañero de camino con quien hayamos andado largo trecho. Ternura. Autoternura.

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Virginia Gawel Pensamiento Sensible